domingo, 15 de enero de 2012

Caramba, caramba

Es lo que he oído esta tarde en un programa de radio, entre nieblas y Comiols.
Caramba, digo yo.
Por recuperar el fluir sobre la nieve. Eso en una nieve casi invisible y después de cuatro años sin catar tabla.
Por no saber qué iglesia del valle escoger cómo la más hermosa.
Por contemplar bellos paisajes y respirar un aire limpio y claro.
Por traerme a casa esa mermelada de tomate que tanto me gusta.
Por documentar un posible tratado antropológico sobre el cholismo en la nieve.
Por recordar que los mejores canalones los sirven en los restaurantes de las carreteras de montaña.
Por saborear un delicioso Somontano en El Mallador de Taüll donde dos simpáticos perretes gigantes se dejan rascar sin contemplaciones y donde en el momento menos pensado se organiza una jam session mitad rústica, mitad urbana. 
Por dormir como un bebé y despertar como una reina.
Por las vacaciones. Muy benéficas con servidora.

Weekend's coda. Pedro Navaja. Al calor de la llar de foc y después de Pink Floyd.

No hay comentarios: