Pase lo que pase, seguir nadando viene bien. Sobre todo cuándo el agua me abraza.
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Leído el sábado en La Vanguardia. La Sabatina intempestiva de Gregorio Morán con su particular punto de vista sobre las elecciones catalanas. Impagable, clara y directa a la mandíbula. Y un claro ejemplo de por qué el periodismo políticamente correcto y buen rollista no vale una mierda. Para ver un mundo dulce, azúcarado y ultrapositivo me voy a un coach, señores.
Aquí el link a la Sabatina. Hagan el favor de leer, perracos, que les conozco.
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El otoño es una época raruna. Si no fuera por esas deliciosas setas amenizan los platos de temporada y las mandarinas dulces y perfectas que lucen en los mercados, el otoño sería un ascazo. Yo lo sorteo probando nuevas recetas y mimando mi cocina. Con el estómago lleno las penas se llevan mejor.
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Momentos musicales de otoño. November rain, de Guns'N Roses. De la época en la que Axel Rose era un tío bueno y el pelopo de Slash molaba mogollón. Stéphanie Seymour sigue siendo guapa. Y mucho.
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